Santo Domingo.-
El abogado Pelegrín Castillo describió a su madre, Sogela Semán, como una mujer excepcional “que edificó su vida alrededor de la familia y la oración”.
“Una mujer de enorme fe que, acompañando a los integrantes de una familia política pública, supo ser un soporte moral y espiritual, una verdadera retaguardia en el frente de luchas que libramos”, dijo Castillo a la salida de la funeraria sobre doña Sogela, a quien recordarán siempre por esos valores y sus enseñanzas.
Con ojos notablemente llorosos, Pelegrín Castillo agradeció a Dios nuevamente por la madre que le dio y por el tiempo que le permitió en la tierra, sobre todo en salud.
Desde el punto de vista del mayor de los hijos que procrearon don Marino Vinicio y doña Sogela, su madre fue un factor de unidad y espiritualidad en la familia Castillo Semán. “¡Viva Dios!”, era su jaculatoria favorita en cada momento de tribulación, según Pelegrín.
Apoyo, fiel acompañante de su padre, mujer de batalla, fe y espiritualidad, son las bondades que la familia y allegados no dejan de mencionar.
Sogela Semán murió la tarde de ayer, a la edad de 90 años. Además de Pelegrín, a la señora le sobreviven sus hijos Vinicio, Juárez y Sogelita Castillo Semán.
Según Pelegrín, aunque le dieron las atenciones necesarias, su madre se complicó en los últimos días luego de que se le produjera un sangrado.
“Una mujer de enorme fe que, acompañando a los integrantes de una familia política pública, supo ser un soporte moral y espiritual, una verdadera retaguardia en el frente de luchas que libramos”, dijo Castillo a la salida de la funeraria sobre doña Sogela, a quien recordarán siempre por esos valores y sus enseñanzas.
Con ojos notablemente llorosos, Pelegrín Castillo agradeció a Dios nuevamente por la madre que le dio y por el tiempo que le permitió en la tierra, sobre todo en salud.
Desde el punto de vista del mayor de los hijos que procrearon don Marino Vinicio y doña Sogela, su madre fue un factor de unidad y espiritualidad en la familia Castillo Semán. “¡Viva Dios!”, era su jaculatoria favorita en cada momento de tribulación, según Pelegrín.
Apoyo, fiel acompañante de su padre, mujer de batalla, fe y espiritualidad, son las bondades que la familia y allegados no dejan de mencionar.
Sogela Semán murió la tarde de ayer, a la edad de 90 años. Además de Pelegrín, a la señora le sobreviven sus hijos Vinicio, Juárez y Sogelita Castillo Semán.
Según Pelegrín, aunque le dieron las atenciones necesarias, su madre se complicó en los últimos días luego de que se le produjera un sangrado.