El este del país pasó a ser epicentro de los combates tras el fracaso de la ‘guerra relámpago’ rusa contra Kiev.
MADRID, (EUROPA PRESS) – La invasión rusa de Ucrania cumple este viernes, 24 de febrero, su primer aniversario con el epicentro de las batallas situado en la región de Donetsk, después de que las Fuerzas Armadas ucranianas hayan logrado durante los últimos meses repeler los avances de Rusia e incluso recuperar territorios en varias regiones en el este y el sur del país.
La ofensiva, que recibió el nombre de «operación militar especial» por parte del presidente ruso, Vladimir Putin, fue planificada como una guerra relámpago que tenía como objetivo tomar la totalidad del Donbás y avanzar hacia la capital, Kiev, en unos pocos días para sacar del poder al mandatario ucraniano, Volodimir Zelenski.
Sin embargo, la respuesta militar de Ucrania y el apoyo entregado a Kiev por parte de sus aliados occidentales ha frustrado las expectativas de la cúpula rusa, que ha visto cómo su Ejército ha sufrido grandes bajas y ha dependido en gran medida de una estrategia de bombardeos y ataques con artillería a gran escala ante la falta de progresos sobre el terreno.
La invasión arrancó con una ofensiva a gran escala por tierra, mar y aire en la que fueron atacadas más de una decena de ciudades, incluidos los alrededores de Kiev, con un desembarco en la ciudad de Odesa y con las tropas rusas cruzando la frontera a través de varios puntos.

Asimismo, las tropas rusas reforzaron sus posiciones en las autoproclamadas repúblicas de Donetsk y Lugansk, cuya independencia fue reconocida por Putin días antes del inicio de la ofensiva.
En el marco de las primeras horas de la invasión, las tropas rusas tomaron la central nuclear de Chernóbil, al tiempo que las fuerzas desplegadas en la península de Crimea –anexionada en 2014– penetraron en territorio ucraniano desde el sur.
Los últimos días de febrero de 2022 vieron cómo las fuerzas de Rusia centraron su atención en los alrededores de Kiev, lo que llevó a las autoridades de Ucrania a pedir a los ciudadanos que se armaran para combatir a «los ocupantes».