CIUDAD DEL VATICANO (AP) — El papa León XIV criticó el domingo el aumento de los movimientos políticos nacionalistas en el mundo y rezó por la reconciliación y el diálogo, un mensaje en línea con sus promesas de hacer de la Iglesia Católica un símbolo de paz.
El papa celebró la Misa dominical en la Plaza de San Pedro frente a decenas de miles de fieles, y pidió al Espíritu Santo que “rompa barreras y derribe los muros de la indiferencia y el odio”.
“Donde hay amor, no hay lugar para los prejuicios, para las zonas de ‘seguridad’ que nos separan de nuestros vecinos, para la mentalidad excluyente que, trágicamente, ahora vemos emerger también en los nacionalismos políticos”, afirmó el primer pontífice estadounidense.
No mencionó a ningún país o político específico.
También recordó las palabras del difunto papa Francisco, quien —en la fiesta de Pentecostés en mayo de 2023— observó que en nuestro mundo “todos estamos conectados, pero nos encontramos desconectados unos de otros, anestesiados por la indiferencia y abrumados por la soledad”.
El papa también condenó las guerras, que “están asolando nuestro mundo”, y pidió al Espíritu Santo “el don de la paz”.
“Primero que nada, paz en nuestros corazones, porque solo un corazón pacífico puede difundir paz en la familia, la sociedad y las relaciones internacionales”, dijo el papa y luego rezó por la reconciliación y el diálogo dondequiera que haya guerra en el mundo.
Poco después de convertirse en papa, Leo se comprometió a trabajar por la unidad y la paz. Su primer mensaje, “La paz sea con todos ustedes”, estableció la importancia de la paz como un pilar de su papado.
También ha hecho un llamado por una paz genuina y justa en Ucrania y un alto el fuego en Gaza.
