El arzobispo coadjutor de la Arquidiócesis de Santo Domingo, monseñor Carlos Tomás Morel Diplán, advirtió que cualquier acto de corrupción que afecte al Seguro Nacional de Salud (SeNaSa) impacta directamente la vida, la salud y la dignidad de la población.
“Senasa está lidiando con la vida, salud y dignidad de las personas… Y eso es muy delicado”, expresó el prelado durante su participación en Reseñas, el podcast, que conducen los periodistas Rafael Núñez, Adelaida Martínez R. Y Yarit Ortiz. .
Morel Diplán sostuvo que los hechos denunciados no debieron ocurrir y señaló que dirigir una institución pública constituye un privilegio que implica una alta responsabilidad ética, sobre todo, cuando se administran recursos destinados a garantizar derechos fundamentales.
Por otro lado, el religioso expresó preocupación por el impacto social de la corrupción en un país de tradición cristiana y afirmó que este tipo de prácticas contradicen los principios morales básicos.
“Va totalmente en contra de las leyes de Dios, de las leyes divinas”, dijo al referirse a conductas como el robo y la mentira en el ejercicio de la función pública.
Durante la entrevista, el arzobispo coadjutor señaló que estos casos no deben quedarse en una denuncia puntual, sino provocar una reflexión profunda en el sistema político e institucional del país, al advertir que la corrupción deteriora la democracia. “Eso va minando la democracia dominicana”, afirmó.
Asimismo, llamó a los partidos políticos a revisar su rol y a replantear su misión ante la sociedad, al considerar que la pérdida de valores éticos genera un progresivo debilitamiento institucional.
“Están perdiendo el norte, no saben hacia dónde van”, expresó.
Morel Diplán vinculó este fenómeno con la formación ética desde el hogar y sostuvo que la solidez de las instituciones depende, en gran medida, de la fortaleza de la familia.
“Si no tenemos familias sólidas, así mismo andarán las instituciones”, aseguró.
Finalmente, advirtió que la corrupción golpea con mayor fuerza a los sectores más vulnerables, al recordar que muchas personas enfrentan dificultades para acceder a medicamentos o procedimientos médicos.
“La salud debería estar asegurada porque es un derecho humano”, concluyó.
