NUEVA YORK (AP) — YouTube ofrecerá a los creadores de contenido una forma de reincorporarse a la plataforma si fueron vetados por violar políticas de desinformación sobre el COVID-19 y las elecciones, las cuales ya no están vigentes, dijo el martes su empresa matriz Alphabet.
En una carta enviada en respuesta a citaciones del Comité Judicial de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, los abogados de Alphabet dijeron que la decisión de restaurar cuentas vetadas refleja el compromiso de la empresa con la libertad de expresión. Afirmaron que la compañía valora las voces conservadoras en su plataforma y reconoce su alcance y su importante papel en el discurso cívico.
“Sin importar cuál sea el ambiente político, YouTube seguirá permitiendo la libre expresión en su plataforma, particularmente en lo que respecta a temas sujetos a debate político”, se lee en la carta.
La medida es la más reciente en una serie de pasos atrás en la moderación de contenido por parte de las empresas tecnológicas, que tomaron medidas enérgicas contra la información falsa durante la pandemia y después de las elecciones de 2020, pero que desde entonces han enfrentado la presión del presidente Donald Trump y otros conservadores, que argumentan que sofocaron ilegalmente las voces de derecha en el proceso.
Esto ocurre mientras los directores ejecutivos de tecnología, entre ellos, el CEO de Alphabet, Sundar Pichai, buscan una relación más cercana con el presidente republicano, incluso al aportar generosas donaciones a su campaña y asistir a eventos en Washington.

En 2023, YouTube retiró gradualmente su política de eliminar contenido que afirmara falsamente que las elecciones de 2020, u otras elecciones presidenciales anteriores en Estados Unidos, estuvieron marcadas por “fraude generalizado, errores o fallos”.
En 2024, la plataforma también retiró sus restricciones independientes sobre contenido relacionado con el COVID-19, permitiendo que se hable de distintos tratamientos para la enfermedad. La desinformación sobre el COVID-19 ahora se enmarca en la política más amplia de desinformación médica de YouTube.