El pueblo le dio la espalda al mandatario en una visita marcada por el rechazo y la indiferencia.
La más reciente visita del presidente Luis Abinader a la provincia Montecristi, resultó ser un verdadero fracaso político, afirmó el presidente del Partido de la Liberación Dominicana allí.
Alexander Rivas, presidente del PLD en Montecristi, fue contundente al señalar que la visita del mandatario no generó entusiasmo alguno en la ciudadanía: “El pueblo está cansado de promesas incumplidas y de obras recicladas”, expresó.
A pesar de la agenda oficial que incluía la inauguración del Cayó Yuti, una planta de energía y una escuela, el pueblo simplemente no acudió.
“La apatía generalizada y la ausencia de respaldo popular dejaron claro que las ejecutorias del gobierno del PRM ya no conectan con la población”, comentó.
Destacó que la obra del Cayó Yuti fue iniciada y ejecutada por el gobierno del PLD, y que el PRM simplemente le dio una mano de pintura para presentarla como suya.
“La frialdad del recibimiento y el silencio del pueblo durante la visita presidencial son una muestra clara del nivel de descontento que vive Montecristi, no hubo movilización masiva, ni muestras de afecto al mandatario. La gente optó por quedarse en sus casas, en un acto simbólico de rechazo ante una gestión que, según muchos, ha estado más enfocada en la propaganda que en resolver los verdaderos problemas de la región”, adujo.
Desde la perspectiva de Alexander Rivas, esta visita fue una evidencia palpable del distanciamiento entre el gobierno de Luis Abinader y la realidad de las provincias.
Al igual que Rivas, Eddy Toribio Marichal, miembro del Comité Central del PLD, le enrostro al presidente Abinader y al PRM, los viajes a la provincia, sin realizaciones que mostrar: “Entre tanto viaje a mi provincia Montecristi, su gobierno y el PRM quebraron la agropecuaria, retrocedieron en salud y educación, se fue la luz 24 horas y hay barrios sin asfaltar”, declaró.
