POR MIKE CORDER, SYLVIE CORBET, MOLLY QUELL and LORNE COOK
LA HAYA, Holanda (AP) — El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, se mostró optimista acerca de la posibilidad de que la organización militar acuerde un aumento masivo del gasto en una “cumbre transformadora” el miércoles, mientras los líderes de los estados miembro, incluido el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se reunían en Holanda.
Se espera que los líderes de la alianza de 32 naciones acuerden un nuevo objetivo de gasto en defensa del 5% del producto interno bruto, mientras Estados Unidos, el socio que más invierte en la OTAN, desvía su atención de Europa para centrarse en prioridades de seguridad en otros lugares.
“Así que es una cumbre transformadora. Estoy impaciente por que llegue”, afirmó Rutte ante reporteros en La Haya, antes de presidir la única sesión de trabajo de la reunión, que se espera que dure menos de tres horas.
Antes de la reunión, España anunció que no podría alcanzar el objetivo para la nueva fecha límite de 2035, calificándolo de “irrazonable”. Bélgica señaló que tampoco lo lograría y Eslovaquia afirmó que se reserva el derecho de decidir su propio gasto en defensa.

Muchos países europeos enfrentan grandes desafíos económicos, y la guerra arancelaria global de Trump podría dificultar aún más que los aliados de Washington alcancen sus objetivos. Algunos ya están reduciendo el gasto en bienestar y ayuda exterior para derivar más recursos a sus presupuestos militares.
Trump se quejó el martes de que “hay un problema con España. España no está de acuerdo, lo cual es muy injusto para el resto, francamente”. El presidente estadounidense criticó también a Canadá por su escasa contribución económica.
En 2018, durante su primer mandato, una cumbre de la OTAN fracasó debido a las discrepancias sobre el gasto en defensa.
Rutte admitió que “estas son decisiones difíciles. Seamos honestos. Quiero decir, los políticos tienen que tomar decisiones en situaciones de austeridad. Y esto no es fácil”. Pero apuntó que “dada la amenaza de los rusos, dada la situación de seguridad internacional, no hay alternativa.”
Los vecinos de Rusia lideran el aumento del gasto
Otros países más próximos a las fronteras de Rusia y Ucrania —Polonia, las tres naciones bálticas y los países nórdicos— se han comprometido con el objetivo, igual que las potencias europeas de la OTAN, Reino Unido, Francia, Alemania y Holanda.
“Esta es una gran victoria, creo, tanto para el presidente Trump como para Europa”, manifestó el presidente de Finlandia, Alexander Stubb, a reporteros. “Estamos presenciando el nacimiento de una nueva OTAN, lo que significa una OTAN más equilibrada”.
Según Stubb, esto llevaría a las naciones “de vuelta a los niveles de gasto en defensa de la Guerra Fría”. Los países de la alianza comenzaron a recortar sus presupuestos militares en una época más segura tras la caída del Muro de Berlín en 1989.
En una nueva interpretación del movimiento MAGA de Trump, el presidente de Lituania, Gitanas Nausėda, dijo: “Deberíamos elegir un lema, ‘hacer a la OTAN grande de nuevo’”.
Después de la invasión a gran escala de Ucrania por parte de Rusia en 2022, los aliados de la OTAN acordaron que el nivel mínimo de gasto sería el 2% de su PIB. El año pasado, se esperaba que 22 países alcanzaran ese objetivo, frente a los apenas tres de hace una década.
En La Haya, los aliados planean una importante revisión de su objetivo de gasto. Se espera que aumenten la cuota destinada a lo que la OTAN llama “gasto central en defensa” al 3,5% de su PIB, al tiempo que cambian la forma de contabilizarlo para incluir el apoyo militar a Ucrania.
Para alcanzar la exigencia del 5% de Trump, el acuerdo establecerá un segundo objetivo del 1,5% del PIB para un rango más amplio de gastos relacionados con la defensa, como la mejora de carreteras, puentes, puertos y aeródromos para que los ejércitos puedan desplegarse más rápidamente; iniciativas para contrarrestar ataques cibernéticos e híbridos, o preparar a las sociedades para enfrentar futuros conflictos.
Los avances se revisarán en 2029, después de las próximas elecciones presidenciales en Estados Unidos.
“Esta declaración es histórica. Somos 32 aliados que apoyamos esa ambición, que es enorme”, señaló el primer ministro de Noruega, Jonas Gahr Støre. “Hemos estado luchando para superar el 2% y ahora hemos dicho que el 3,5%, que es necesario para alcanzar nuestras capacidades”.
A principios de este mes, la OTAN acordó objetivos individuales de compra para sus miembros se abastezcan de armas y equipos militares para defender mejor Europa, el Ártico y el Atlántico Norte, como parte del impulso de Washington para aumentar el gasto en seguridad.
EEUU decidirá sobre sus fuerzas en Europa en los próximos meses
También se necesitarán fondos adicionales si el gobierno de Trump anuncia una reducción de fuerzas en Europa, donde tiene alrededor de 84.000 soldados, lo que convertiría a los aliados europeos en los responsables de cubrir cualquier brecha de seguridad. Se espera que el Pentágono anuncie sus intenciones en los próximos meses.
Más allá de las exigencias de Trump, los aliados europeos y Canadá han aumentado drásticamente el gasto en defensa debido a la preocupación por la amenaza que representa Rusia.
A varios les inquieta que Moscú pueda llevar a cabo un ataque en territorio de la OTAN para finales de la década. Hungría, sin embargo, no es uno de ellos.
“Creo que Rusia no es lo suficientemente fuerte como para representar una amenaza real para nosotros. Somos mucho más fuertes”, dijo el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, que respondió a preguntas de los reporteros recostado y con las manos en los bolsillos.
Orbán está considerado el aliado más cercano al presidente ruso, Vladímir Putin, en la Unión Europea.