POR MATTHEW DALY
WASHINGTON (AP) — En lo que llamó el “día más trascendental de desregulación en la historia estadounidense”, el director de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) anunció una serie de acciones el miércoles para anular regulaciones ambientales históricas, incluidas las normas sobre la contaminación de las plantas de energía de carbón, el cambio climático y los vehículos eléctricos.
“Estamos clavando un puñal en el corazón de la religión del cambio climático y dando la bienvenida a la Edad de Oro de Estados Unidos”, escribió el administrador de la EPA, Lee Zeldin, en un ensayo en The Wall Street Journal.
Sus acciones eliminarán billones de dólares en costos regulatorios e “impuestos ocultos”, escribió Zeldin, reduciendo el costo de vida para las familias estadounidenses y disminuyendo los precios de elementos esenciales como la compra de un automóvil, la calefacción del hogar y la operación de un negocio.
“Nuestras acciones también reavivarán la manufactura estadounidense, extendiendo los beneficios económicos a las comunidades”, escribió Zeldin.
En total, Zeldin afirmó que está revirtiendo 31 normas ambientales, incluida un hallazgo científico que ha sido durante mucho tiempo la base central de la acción de Estados Unidos contra el cambio climático.
Zeldin afirmó que él y el presidente Donald Trump apoyan reescribir el hallazgo de 2009 de la agencia según el cual los gases de efecto invernadero que calientan el planeta ponen en peligro la salud y el bienestar público.
Esa determinación de la era Obama bajo la Ley de Aire Limpio es la base legal de una serie de regulaciones climáticas para vehículos, plantas de energía y otras fuentes de contaminación.
Los ambientalistas y científicos del clima consideran que esa norma es un pilar de la ley estadounidense y dicen que cualquier intento de deshacerla tendrá pocas posibilidades de éxito.
“Ante la evidencia científica, es imposible pensar que la EPA podría desarrollar un hallazgo contradictorio que se mantendría en los tribunales”, sostuvo David Doniger, un experto en clima de Natural Resources Defense Council, un grupo ambiental.
En una acción relacionada, Zeldin dijo que la EPA reescribirá una norma que restringe la contaminación emanada por plantas de energía alimentadas por combustibles fósiles y una medida separada que restringe las emisiones de automóviles y camiones.
Zeldin y el presidente republicano etiquetan incorrectamente esa norma como una “obligación” de comprar vehículos eléctricos.
La administración demócrata del presidente Joe Biden había dicho que las normas sobre las plantas de energía reducirían la contaminación y mejorarían la salud pública, al tiempo que apoyarían el suministro confiable y a largo plazo de electricidad.
La EPA también se enfocará en las normas que restringen la contaminación industrial de mercurio y otros tóxicos del aire, así como en normas separadas sobre la contaminación por hollín y protecciones federales para áreas significativas de humedales.
“No se trata de abandonar la protección ambiental, se trata de lograrla a través de la innovación y no de la estrangulación”, escribió Zeldin.
“Al reconsiderar las normas que estrangularon la producción de petróleo y gas y que apuntaron injustamente a las plantas de energía de carbón, estamos asegurando que la energía estadounidense siga siendo limpia, asequible y confiable”.
El científico del clima de la Universidad de Pensilvania, Michael Mann, calificó la acción de la EPA como “solo la última forma de negación del clima por parte de los republicanos. Ya no pueden negar que el cambio climático está ocurriendo, así que en su lugar están pretendiendo que no es una amenaza, a pesar de la abrumadora evidencia científica de que lo es, quizás, la mayor amenaza que enfrentamos hoy”.
