Berlín .- Alemania necesita invertir 600.000 millones de euro para sanear carreteras, vías férreas y puentes en mal estado, infraestructuras educativas deficientes y edificios obsoletos y paliar la falta de infraestructuras para electricidad, hidrógeno y calefacción con el fin de garantizar una economía sostenible, según un estudio de dos institutos económicos.
Esta cantidad ayudaría a hacer avanzar a Alemania en los próximos diez años, mejorar el sistema educativo, eliminar el retraso de inversiones a nivel local, mejorar las carreteras y el ferrocarril y permitir la descarbonización, según el informe del Instituto de la Economía Alemana (IW) y el Instituto de Macroeconomía e Investigación Coyuntural (IMK) de la Fundación Hans Böckler.
Ya en 2019, estos instituto habían estimado la necesidad de inversión pública adicional para los próximos diez años en al menos 460.000 millones de euros, pero desde entonces la presión para invertir ha aumentado, también debido a la guerra de agresión rusa contra Ucrania.
Así, alrededor de un tercio de la suma mencionada se necesita para resolver el retraso en obras de saneamiento en ciudades y municipios -177.000 millones de euros- y para medidas de protección ante fenómenos meteorológicos extremos, como lluvias torrenciales o calor -13.000 millones-.
Los expertos estiman en unos 200.000 millones de euros la necesidad de inversión pública en protección del clima, con la partida más importante destinada a la rehabilitación energética de edificios.
Otras tareas importantes son la ampliación de las redes de electricidad, hidrógeno y calor, la generación y almacenamiento de energías renovables y el fomento de la eficiencia energética y la innovación.
Unos 127.000 millones de euros deberían destinarse a vías y transporte local, en concreto, 60.000 millones a modernizar y ampliar la red ferroviaria y 28.000 millones al transporte, además de 39.000 millones para poner a punto las carreteras.
Los expertos calculan que en infraestructuras educativa sería necesario invertir unos 42.000 millones de euros, 7.000 de ellos en escuelas y 35.000 millones en sanear universidades.
Por último, los dos institutos consideran que habría que invertir 37.000 millones adicionales en la construcción de vivienda social en los próximos diez años para paliar la escasez de vivienda en muchas grandes ciudades.
Según el director de IW, la economía alemana se enfrenta a enormes retos y por eso es necesario ahora decir adiós a medidas poco sistemáticas para hacer que el país esté preparado para el futuro.
El director de IMK, Sebastian Dullien, también recomendó acelerar el ritmo para lograr todas estas mejoras, que beneficiarán a economía y empleados, «y naturalmente a la próxima generación», dijo.