La alerta por calor excesivo está vigente hasta el 25 de julio en Maricopa, según indica la web del condado, en la que las autoridades piden a la gente que tome precauciones para no sufrir el temido golpe de calor o hipertermia y les dan consejos para lograrlo.
La empresa privada de meteorología Accuweather informó este domingo que, según un índice propio que mide tanto la duración de una ola de calor como su severidad, esta es la más intensa que ha experimentado Phoenix desde que comenzaron los registros en 1895.
La anterior ola de calor récord fue en 1974, cuando Phoenix padeció 18 días a una temperatura máxima de 110 grados (43,4 grados Celsius) o más, lo que ya ha sido superado, además del récord de la temperatura mínima diaria más alta, que es de 97 grados (36,1 grados Celsius).
Este fin de semana más de 75 millones de estadounidenses están bajo a alguna alerta, advertencia o aviso de calor extremo.
El mapa de calor del Servicio Meteorológico Nacional mostraba hoy los colores más oscuros, correspondientes a las mayores temperaturas, en gran parte de Arizona y zonas de California, Nevada y Utah, además de la zona de Miami, en Florida.
«Manténgase fresco, hidratado e informado» es lo que recomienda el Departamento de Salud de Maricopa para este domingo.
En caso de golpe de calor, lo que se debe hacer es sumergirse o rodear el cuerpo de agua fría con hielo para bajar la temperatura interna corporal, según señalaron los bomberos de Phoenix en declaraciones medios locales.
Los medios destacan que mucha gente debe cuidarse de usar el aire acondicionado todo el tiempo por el coste de la electricidad, pero el calor es tan insoportable que deben tenerlo prendido aunque sea a una temperatura no muy baja.
Para los que ni siquiera tienen esa posibilidad se han habilitado refugios para sobrellevar el calor.
Usuarios de YouTube han mostrado de una manera muy visual los efectos del calor extremo con vídeos en los que se ve como se cocina una pizza o unas galletas en una placa metálica dentro de un automóvil estacionado al sol en Phoenix. EFE