Perú, RT.-.El escritor peruano Mario Vargas Llosa ha vuelto a posicionarse claramente en la política interna de país natal, tras recibir la Orden del Sol del Perú en el grado de Gran Collar de manos de Dina Boluarte y fustigar a los Gobiernos que no reconocen la legitimidad de la mandataria.
A pesar de que su sola presencia, acompañado de su exmujer Patricia Llosa y sus tres hijos, ya evidenciaba un apoyo a la figura de Boluarte, el escritor quiso hacer este respaldo más explícito a través de su discurso de agradecimiento.
«Reconozco en usted a la presidenta constitucional del Perú, porque ha asumido la primera magistratura respetando la legalidad y el Estado de Derecho», afirmó Vargas Llosa durante una comparecencia que terminó con un deseo: «Hago votos por el éxito de su gestión y la normal constitución de nuestra estricta democracia».
En esta línea de respaldo, el Nobel consideró «una injusticia sostener, como lo hacen algunos grupos interesados, que en el Perú se ha producido una ruptura del orden constitucional y de la democracia», frente a las críticas recibidas por el país andino por la gestión de las protestas, que comenzaron en diciembre y que se han saldado con más de 60 muertos y más de 1.300 heridos.
Las declaraciones del ganador del Nobel de Literatura se dieron justo el día en que se cumplían tres meses de la asunción de Boluarte, quien tiene una desaprobación popular que, según encuestas, se ubica por encima del 70%, en medio de masivas protestas que exigen su renuncia mientras la califican de «dictadora» y «autoritaria».
Intervención «indecorosa»
Durante su discurso, Vargas Llosa aprovechó también para señalar a los dirigentes que han sido especialmente críticos con el mandato de Boluarte y su gestión, aunque sin nombrarlos explícitamente.
«Como es sabido, algunos Gobiernos de la región, movidos por ideologías o intereses políticos, han intervenido de manera indecorosa en los asuntos internos peruanos arrastrando a los vecinos, poniendo en duda la legitimidad de su Gobierno», relató el escritor, ampliamente identificado con los sectores de la derecha y extrema derecha latinoamericana.
«Hay que recordarles que en el Perú prevalece la democracia y rechazamos firmemente su injerencia, que viola las normas internacionales y los más elementales principios de la buena vecindad», denunció.
Del mismo modo, en relación al trabajo de la prensa sobre los acontecimientos registrados en Perú durante los últimos tres meses, el novelista aconsejó como algo «indispensable», «corregir» las «deformaciones» que a su parecer divulgan los medios, para así «evitar» que «afecten la democracia».
