El hecho ocurrió en una vía del departamento de Arauca, al este de Colombia.
Colombia, RT.-. Parte del esquema de seguridad asignado al exmiembro del secretariado de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) Pastor Alape fue retenido y desarmado por personas que se identificaron como integrantes del Ejército de Liberación Nacional (ELN), organización que actualmente lleva a cabo un diálogo de paz con el Gobierno.
El hecho ocurrió el miércoles, pasadas las 02:00 de la tarde [hora local] en el departamento de Arauca, al este de Colombia, informó el exlíder de las FARC y presidente del partido Comunes, Rodrigo Londoño, alias ‘Timochenko’, a través de su cuenta en Twitter, en la que publicó un comunicado del Consejo Nacional de Reincorporación (CNR).
La acción se produjo concretamente en la vía que conduce del municipio de Tame a la capital de Arauca, de similar nombre. Ahí, los guerrilleros retuvieron al esquema de protección de Alape, quienes pertenecen a la Unidad Nacional de Protección (UNP) —adscrita al Ministerio del Interior de Colombia—, los despojaron de sus armas y, tras más de cuatro horas retenidos, los dejaron en libertad.
«Los agentes escoltas se dirigían a la capital araucana a brindar protección al delegado ante el CNR (Alape), quien debía asistir a la sesión 142 de esta instancia, en la que se abordarán temas de seguridad territorial para establecer acciones dirigidas a garantizar los procesos de reincorporación como en el caso de Arauca, donde la semana pasada, en el mismo municipio de Tame, fue asesinado el firmante de paz Marlon Eduardo Vargas Mejía», dice el comunicado.
En el texto señalan que este atentado del ELN contra personal de la UNP, así como el ocurrido contra el el director de esta instancia, Augusto Rodríguez, el pasado martes, «son funcionales a la estrategia de poderosos sectores de la derecha terrorista, dirigidos a afectar la gobernabilidad del presidente Gustavo Petro» y para «mantener las dinámicas violentas que garantizan las prácticas de la apropiación de lo público por las mafias de la corrupción».
Ante ello, el CNR llamó al ELN y a las demás organizaciones armadas que han manifestado su voluntad de diálogos de paz a «hacer una profunda reflexión sobre el cómo actuar de forma consecuente».
«La construcción de paz pasa por ganar credibilidad en todos los sectores de la sociedad y para lograrlo hay que refrendar la palabra con hechos consecuentes a lo planteado», añaden en el documento.
