La moción aprobada por la Asamblea Nacional supone la destitución temporal del ministro del Interior y Seguridad, que deberá ser ratificada o rechazada por la Corte Constitucional en un plazo de 180 días.
Corea del Sur, RT.-.La Asamblea Nacional de Corea del Sur, controlada por la oposición, ha acusado este miércoles al ministro del Interior y Seguridad del país, Lee Sang-min, por fallos en la planificación y respuesta a la estampida que causó la muerte de 159 personas en octubre pasado durante las celebraciones de Halloween en Seúl, destituyéndolo temporalmente de su cargo, informa Yonhap.
Con 179 votos a favor y 109 en contra, la Asamblea Nacional aprobó una moción de juicio político y la destitución de Lee, suspendiéndolo así de sus funciones hasta que la Corte Constitucional, que tiene 180 días para pronunciarse sobre el caso, decida si mantiene o rechaza la moción.
De acuerdo con los promotores de la iniciativa, Lee es responsable de descuidar la prevención de desastres y la seguridad del pueblo. Además, se lo acusa el violar el deber de buena fe como funcionario público y realizar comentarios inapropiados a las familias de las víctimas.
Según el medio, la aprobación de este juicio político es el primero en la historia del país contra un miembro del Gabinete. En el pasado, dos presidentes, Roh Moo-hyun y Park Geun-hye, fueron acusados por la Asamblea Nacional en 2004 y 2016, respectivamente.
La Corte Constitucional rechazó la acusación contra Roh, pero respaldó la de Park, destituyéndola del cargo.
Por su parte, Lee expresó su pesar sobre la acusación y aseguró que defenderá su caso ante el Constitucional. «Espero que se minimice el vacío en la seguridad pública que causaría esta situación sin precedentes», afirmó.
El Gobierno y el partido gobernante también se pronunciaron al respecto y sostuvieron que el funcionario no violó la ley ni la Constitución en su respuesta a la aglomeración de la multitud.
La oficina del presidente Yoon Suk Yeol calificó el juicio político a Lee como una «vergüenza». «Es un abandono del parlamentarismo», declaró la oficina. «Pasará a la historia parlamentaria como una vergüenza», agregó.
La tragedia ocurrió el pasado 29 de octubre durante las celebraciones de Halloween en una calle estrecha de la capital surcoreana donde se habían concentrado decenas de miles de personas.
La mayoría de las víctimas tenían entre 20 y 30 años.
La estampida se considera como la más mortífera de la historia de Corea del Sur. Tras el suceso, el presidente Yoon Suk-yeol declaró un periodo de luto nacional.