Santo Domingo, DN: Los suelos privilegiados con que cuenta República Dominicana para la producción de alimentos son cada vez utilizados para la siembra de varilla y cemento, sin que se actué para evitar a futuro posibles déficit en la oferta de bienes agrícolas.
El tema fue expuesto por el diputado Modesto Reyes, quien advierte que el fenómeno amenaza con poner en riesgo la seguridad alimentaria debido a que, sin ningún control, el desarrollo inmobiliario se traga las tierras de vocación agrícola.
El legislador estimó que cerca de un 30% de las tierras de vocación agrícola se han reducido en cuya realidad también influye el llamado conuquismo frente al que el Gobierno tiene que reaccionar.
Criticó que en vez de proteger al productor nacional se privilegia a un pequeño grupo al señalar que “en 2021 importamos más de 4,000 millones de dólares en productos agropecuarios, eso nos lleva a pensar que, probablemente, se necesita una política de protección de la producción nacional, porque con las importaciones se beneficia un grupo muy pequeño”.
“Nosotros debemos llamar la atención de los legisladores para que aceleren la aprobación de esta ley, porque el país no puede estar manga por hombro en materia de la preservación de los mejores suelos”, indicó.

Se quejó de que por preferir lo atractivo de los proyectos inmobiliarios, se permita que tierras privilegiadas para la producción agrícola sean sepultadas, situación que se verifica y crece en puntos importantes como las provincias Espaillat, Hermanas Mirabal, La Vega, y Licey al Medio en Santiago.
El diputado Modesto Reyes denunció que una situación aparecida se produce en Constanza “donde abundan los cultivos de frutas y vegetales, pero los suelos están siendo usados para urbanizaciones, cabañas y demás”.
Criticó que mientras la práctica crece en el congreso da vueltas un proyecto de ley que busca establecer el ordenamiento territorial, el uso de suelo y asentamientos humanos, pero que tiene cinco años en manos de una comisión bicameral.
“Usted sabe cuántos miles de años se requieren para que se forme un centímetro de suelo, más de mil años, entonces nosotros debemos preservar lo que tenemos, no se trata de algo insignificante, el suelo es lo básico, y en cualquier país que quiera tener soberanía alimentaria deben preservarse”, señaló.
Criticó que los Gobiernos locales tampoco están asumiendo el rol que les corresponde para preservar y proteger las tierras que resuenen las mejores condiciones para la producción de alimentos.
“Los gobiernos locales están de espaldas a esa situación, porque quién emite los permisos para las construcciones, son los ayuntamientos, obras públicas. Por eso decimos que el tema del ordenamiento territorial es necesario que se apruebe la ley”, refirió.