Por Francisco Reyes Guzmán
El controversial ministro Roberto Furcal ha sido destituido del cargo mediante el Decreto 414-22 de este miércoles y, en su lugar, el presidebte Luis Abinader ha designado a Ángel Enrique Castillo, quien obtuvo una Licenciatura en Ciencias de la Educación en la PUCMM y un Doctorado en Francia.
Sin embargo, Furcal no quedó cesante porque en el mismo decreto fue designado ministro sin cartera. El ex jefe de campaña del PRM no necesita cartera porque, según se alega en círculos de prensa, se ha llevado baúles repletos de dinero debido a irregularidades con los presupuestos del MINERD.
Desde sus días iniciales al frente del MINERD, la administración de Furcal se ha caracterizado por el uso indebido de fondos públicos, como ocurrió con la compra de orquídeas por más de $75,000 pesos para decorar el edificio del ministerio, así como la utilización de más de $150,000 pesos para la compra de sus trajes personales.
Esos no son los únicos escándalos de corrupción en los que supuestamente está envuelto Furcal. La opinión pública ha puesto en tela de juicio algunos procesos de licitaciones en el Ministerio de Educación, como fue el uso de unos $400 millones de pesos para la compra de zapatos de charol fabricados en China para donarlos a estudiantes de escasos recursos económicos, pero no llegaron a sus destinatarios.

También se alega de presuntas licitaciones amañadas en la compra de laptops para el programa de educación a distancia, que Furcal desmintió en medios de prensa, pero no ha habido ninguna auditoría al respecto realizada por la Cámara de Cuentas.
Poco antes de su destitución en el MINERD, la Dirección General de Contrataciones Públicas suspendió la ejecución de varios contratos para la adquisición de libros digitales de secundaria para el próximo año escolar.
Ayer se supo que una de las empresas envueltas en los contratos es propiedad de Furcal.
A la destitución de Furcal deben seguir las auditorías correspondientes para determinar si hubo o no corrupción y malversación de fondos por parte del ex ministro impopular, que manejó a su antojo el presupuesto del Ministerio de Educación que asciende a más de $100,000 millones de pesos cada año.
Estamos seguros de que la gestión de Furcal en el MINERD no será auditada, como no se ha hecho con Cecilio Rodríguez en el INABIE, donde se produjo el robo de unos $70,000 millones de pesos y aun no se ha hecho un expediente judicial para llevarlo al banquillo de los acusados.
Furcal ahora estará por los predios del Palacio Nacional donde se produce el «Show de escándalos» del «fin de semana con Luisito» perjudicando a millones de ciudadanos dominicanos.