Jugando al fracaso
De penoso y desolador podría calificarse el futuro de los dominicanos. No hay esperanza de que este país salga del atraso en que lo tienen sumidos los políticos que lo han gobernado y que como si fuera poco algunos quieren volver.
Definitivamente, no hay un partido mayoritario con calidad para ofrecer soluciones a los problemas que enfrentamos los dominicanos. Todo lo que se diga es pura chachara, ya todos han tenido suficiente oportunidad y sin embargo, sigue la delincuencia, la pobreza, la falta de agua potable, calles sin asfaltos, aceras y contenes etc,etc.
La oposición ataca con crueldad al gobierno de Abinader. Tanto Danilo Medina como Leonel Fernández, juegan a la mentirita piadosa, abusando de un pueblo aturdido por la violencia, la cual ninguno podido erradicar, los altos precios de los alimentos y una pandemia que se resiste a dejarnos en paz.
En medio de todo estos problemas locales, fruto de la crisis dejada por el COVID y la guerra de Rusia en Ucrania, hay que admitir que se le ha trancado el juego al presidente Luis Abinader, y para colmo de los males batalla contra un sistema de mayoría corrupta, la cual no es fácil enfrentar.

Los que estuvieron por muchos años y ahora quieren volver se explayan con discursos de barricada, ofreciendo lo que no hicieron, mientras los que están gobernando hoy, se encuentran de frente con la dura realidad de que una cosa es desde la oposición y otra es cuando se está en el poder.
En el gobierno 2000- 2004, que encabezó Hipólito Mejía, el PLD maniobró jugando al fracaso de esa gestión, a tal punto que que el dólar subió por las nubes, politizó la crisis bancaria de ese entonces con el fin de sacar al PRD del poder. Hoy se repite la historia, solo que los temas son diferentes.
Bajo el lema de disfama que algo queda, o una mentira repetida muchas veces crea confusión, la Fuerza del Pueblo, con el ex presidente Leoenel Fernández a la cabeza y el PLD, ya subieron el pollo a 100 pesos, hoy son expertos en estrategias para frenar la delincuencia y dentro de poco saldrán a las calles a decir que el COVID no se ha ido por la incapacidad del actual gobierno dominicano.
Como diría el humorista Reymon Pozo, en este país solo están diciendo la verdad los vendedores de limones agrios, lo demás es pura retórica politiquera y por ello nadie se sorprenda si algún político o política de los que aspiran a salvar el mundo en el 2024, se destapa diciendo que de llegar al poder, pondrán fin a la guerra entre Rusia y Ucrania.