Santo Domingo.-La desesperación y preocupación se apodera de los familiares de los internos de la Cárcel de la Victoria, al desconocer la situación de sus parientes por el incendio que anoche había causado tres muertes y varios heridos por quemaduras, entre ellos tres bomberos.
Esta situación causó que madres, primos, esposas y otros parientes se trasladaran al recinto y se apostaran a la entrada, donde lloraban y, agobiados por la incertidumbre, pedían información a las autoridades sobre la situación con la esperanza de saber si alguna de las víctimas era uno de los suyos.
Familiares de los internos esperaban por informaciones.
Desde a pocos metros de la estrada del recinto, solo observaban la entrada y salida de camiones tanqueros de los bomberos de Santo Domingo Oeste, Norte, Este, del Distrito Nacional, y del municipio de La Victoria.
El incendio, atribuido a un cortocircuito, inició ayer alrededor de las 11:00 de la mañana.
Tras iniciarse el fuego, se presentó el director general de Servicios Penitenciarios y Correccionales, coronel Roberto Hernández.
El penal
La cárcel de La Victoria alberga alrededor de 7,608 internos, según datos de la Defensoría Pública.
Ese penal, entró en operación el 16 de agosto de 1952, construido por Rafael Trujillo Molina para alojar a 1,200 reclusos, pero apenas podían estar unos 800.
El incendio afectó los pabellones Uno, Dos, Tres y Cuatro, en los que había unos 1,100 internos, por lo que agentes de los distintos departamentos de la Policía trasladaban reclusos a otras áreas y cárceles para resguardar sus vidas.
Al lugar del siniestro también se presentó el director de la Policía, mayor general Ramón Antonio Guzmán Peralta; el ministro de Interior, Jesús Vásquez, y el Defensor del Pueblo, Pablo Ulloa.
Además de los bomberos, entraban y salían del recinto varias unidades del Sistema Nacional de Atención a Emergencias y Seguridad (9-1-1), de la Defensa de Civil, de la Cruz Rojas, del Ministerio Público y de Salud Pública, para asistir a los internos afectados con quemaduras y por inhalar humo producto del incendio.
Una de las unidades del 9-1-1 usadas para socorrer afectados.
En el hospital
Anoche, mientras seguían siendo trasladados reclusos desde el Penel de La Victoria, la vía se entraba completamente embotellada y como consecuencia inmovilizados los vehículos acondicionados con ese fin.
En las áreas de Emergencias de la Unidad de Quemados Pearl F. Ort y el Ney Arias Lora habían sido recibidos diez pacientes provenientes del La Victoria.
El doctor Julio Landrón, director general del Hospital Universitario Docente Traumatológico Dr. Ney Arias Lora, dijo que de los pacientes recibidos, uno fue llevado sin vida al centro de salud, nueve fueron ingresados por inhalación de humo para fines de observación y de estos, dos presentan quemaduras entre 1 y 2% de superficie corporal
Entre los pacientes ingresados hay tres miembros del Cuerpo de Bomberos, afectados por inhalación de humo, presentan sintomatología propia al monóxido de carbono, como son, dolor torácico, dificultad respiratoria y cefalea. Ambos están estables.
Tanto los médicos del Ney Arias Lora, como de la Unidad de Quemados, informaron que a los pacientes se les realiza analíticas de control y se encuentran estables.
Miembros del cuerpo de bomberos en plena labor.
Todos tienen un componente inhalatorio, por lo que son asistidos con los protocolos de rigor en las Emergencias de ambos centros.
Anoche se les atendía con oxígeno al 100 por ciento debido al humo inhalado en el Penal.