Casi todos los 3,000 supermercados que existen en NYC han sido atacados por ladrones en los últimos meses y muchos están siendo robados a diario aún habiendo redoblado las medidas de seguridad.
Casi todos los 3,000 supermercados que existen en la Ciudad de Nueva York han sido atacados por ladrones en los últimos meses y la mayoría denuncia que están siendo robados a diario, según una nueva encuesta.
Según un estudio de la Asociación Nacional de Supermercados (NSA), 93% de esos establecimientos en los cinco condados de NYC han sido víctimas de ladrones armados buscando dinero y/o rateros que se llevan mercancía. En total, el 60% afirmó que sus tiendas eran robadas los siete días de la semana.
“Es como si ahora sintieran que tienen licencia para robar en tiendas”, dijo al New York Post Carlos Collado, propietario de dos tiendas Fine Fare en El Bronx y Harlem. Se lamentó de las reformas de justicia penal del estado activadas en enero de 2020 que hicieron que los robos de menos de $1,000 dólares no necesitaran fianza.
“Sienten que no hay consecuencias y lo están convirtiendo en una profesión”, agregó Collado, explicando que muchos delincuentes están robando artículos caros como helados Haagen Dazs para cambiarlos por dinero en efectivo.
La ciudad de Nueva York experimentó un aumento de 64% en reportes de robo en tiendas minoristas durante el período de cuatro años comprendido entre mediados de 2019 y junio de este año, liderando en Estados Unidos con los incidentes en ese rubro, alertó otro estudio del Council on Criminal Justice (CCJ).
Según la encuesta de la NSA, 72% de los propietarios de supermercados de NYC dijeron que han reforzado las medidas de seguridad, pero eso no ha resuelto el problema. Frank Pimentel, propietario de un supermercado SuperFresh en Mott Haven y de Food Universe en Melrose, ambos en El Bronx, afirmó que sus tiendas siguen siendo atacadas varias veces al día, incluso con guardias de seguridad apostados en el interior.
Los defensores de las empresas minoristas han rogado al Congreso estatal en Albany que revise las leyes de reforma de las fianzas y aumente las penas para los ladrones, como acusar a los reincidentes que roban más de $1,000 dólares en mercancías acumulativamente con hurto mayor y convertir incluso las agresiones a los trabajadores minoristas en un delito grave.
La semana pasada la gobernadora Kathy Hochul vetó un proyecto de ley bipartidista que habría creado un grupo de trabajo para estudiar el reciente aumento del robo en comercios minoristas en todo el estado y cómo ha afectado las ganancias de las pequeñas empresas.
Sin embargo, el alcalde Eric Adams sí estableció un grupo de trabajo a principios de este mes para abordar el flagelo del hurto con el objetivo de permitir que las agencias de la ciudad compartan fácilmente información sobre delitos.
Ha habido 49,384 quejas por robo en tiendas en toda la ciudad este año hasta el 30 de octubre, una disminución del 8% en comparación con el mismo período del año pasado, según datos de la policía de Nueva York. Sin embargo, los incidentes de robo en tiendas se han disparado en comparación con los tiempos anteriores a la pandemia: en 2019 sólo hubo 37,919 quejas reportadas.
Los hurtos en las tiendas minoristas de la ciudad de Nueva York subieron un alarmante 81% durante el primer trimestre de 2023, en muchos casos con ataques violentos a empleados y propietarios de los negocios.
Así lo denunció en mayo el grupo Acción Colectiva para Proteger Nuestras Tiendas (Collective Action to Protect Our Stores, CAPS-NY) que representa a 5,000 establecimientos, incluidos supermercados y bodegas, volviendo a exigir que los congresistas estatales aprueben leyes contra el hurto en las tiendas.
Muchos dueños han optado por reducir los horarios, instalar más cámaras y colocar mercancía bajo llave ante el alza en los robos en tiendas, farmacias y bodegas.
La situación genera además cierres de fuentes de trabajo y escasez de productos. Por ejemplo, en septiembre Target anunció que cerraría nueve tiendas en cuatro estados del país, incluida una en East Harlem (NYC). Según la empresa, el crimen minorista organizado ha amenazado la seguridad de sus trabajadores y clientes.
En septiembre de este año un sondeo de Siena College identificó el crimen (73%) entre las mayores preocupaciones de los neoyorquinos. Según otra alarmante encuesta divulgada este verano 70% de los habitantes de NYC temen que serán víctimas de un hecho criminal.