POR SAMY MAGDY
EL CAIRO, Egipto (AP) — Los hutíes respaldados por Irán en Yemen han detenido a nueve empleados de Naciones Unidas como parte de una prolongada represión contra la organización, informó la ONU.
Las detenciones elevan a 53 el número de trabajadores de la ONU detenidos en territorios controlados por los hutíes en Yemen desde 2021, manifestó el portavoz de la ONU, Stephane Dujarric, en un comunicado el lunes por la noche.
No se dieron detalles sobre las circunstancias o el momento de las últimas detenciones.
Dujarric expresó que la represión ha impedido “la capacidad de la ONU para operar en Yemen y brindar asistencia crítica” a la población local en el país más pobre del mundo árabe.

Hizo un llamado para “la liberación inmediata e incondicional” de todo el personal de la ONU, así como de trabajadores de otras organizaciones internacionales y misiones diplomáticas que han sido detenidos por los rebeldes.
“Deben ser respetados y protegidos de acuerdo con el derecho internacional aplicable”, afirmó Dujarric.
Un portavoz de los rebeldes no respondió a las llamadas y mensajes en busca de comentarios.
Los rebeldes han dicho anteriormente que su represión contra la ONU y otros grupos internacionales está vinculada a presuntos miembros de una supuesta red de espionaje.
En agosto, los rebeldes allanaron oficinas de la ONU en la capital, Saná, y detuvieron a 19 empleados, según la ONU. Posteriormente liberaron a Lana Shukri Kataw, la subdirectora de UNICEF en el país.
Las redadas fueron las últimas en una prolongada campaña de los hutíes contra la ONU y otras organizaciones internacionales que operan en áreas controladas por los rebeldes en Yemen.
La represión ha obligado a la ONU a suspender sus operaciones en el bastión hutí de Saada, provincia en el norte de Yemen, tras la detención de ocho empleados en enero.
La ONU también trasladó a su principal coordinador humanitario en Yemen de Saná a la ciudad costera de Adén, que sirve como sede del gobierno reconocido internacionalmente.
Yemen se sumió en una guerra civil en 2014 cuando los hutíes tomaron Saná y gran parte del norte de Yemen, forzando al gobierno reconocido internacionalmente al exilio.
Una coalición liderada por Arabia Saudí que incluía a Emiratos Árabes Unidos intervino al año siguiente en un intento por restaurar el gobierno.
La guerra ha estado estancada en los últimos años, y los rebeldes alcanzaron un acuerdo con Arabia Saudí que detuvo sus ataques al reino a cambio de cesar los ataques liderados por Arabia Saudí en sus territorios.
Los rebeldes han cruzado ataques con Israel por la guerra en Gaza. También han atacado barcos que navegan en el mar Rojo frente a Yemen a los que acusa de tener vínculos con Israel.
Israel ha lanzado previamente oleadas de ataques aéreos en respuesta al lanzamiento de misiles y drones por parte de los hutíes hacia Israel.