QUITO (AP) — En una seguidilla de hechos violentos en la costa de Ecuador, un nuevo ataque armado dejó el sábado 10 muertos en un billar de una ciudad de la provincia del Guayas, en el suroeste del país andino, informó la policía.
El hecho ocurre pocos días después de otros ataques armados que sumaron más de 15 muertos, en la también provincia costera, Manabí. Unos 2.500 militares y policías están desplegados en esta zona para reforzar controles y patrullajes.
“De manera preliminar se registran 10 personas fallecidas por arma de fuego”, en un billar de la ciudad de Playas —a unos 380 kilómetros al suroeste de Quito—, señaló un reporte de la policía, sin dar mas detalles.
La prefecta del Guayas, Marcela Aguiñaga, aseguró en X que una de las víctimas era un instructor de fútbol de las escuelas de la Prefectura.
“La violencia no da tregua, quiere arrodillarnos, silenciarnos, acostumbrarnos al horror”, escribió.

Imágenes difundidas por medios locales digitales dejaban ver un reguero de sangre y los cuerpos de varios hombres tendidos en el suelo cerca de unas mesas de billar, mientras una mujer gritaba en la escena.
Violencia en Manabí
Esta provincia está en la denominada ruta del Pacífico utilizada para el traslado de drogas hacia Centroamérica, Estados Unidos y Europa, según las autoridades.
El jueves, seis personas fueron asesinadas en una cancha de la ciudad Montecristi, a los que se sumaron un guardia penitenciario y un policía en la ciudad portuaria de Manta, 265 kilómetros al suroeste de Quito.
Un día antes, cuatro personas fueron acribilladas en una vía que conduce a esa localidad; una de ellas fue identificado por las autoridades como cabecilla de una banda criminal. Esa noche, cinco personas murieron en un centro nocturno.
Las autoridades adjudicaron los hechos a una disputa por el control territorial en esa zona estratégica del Pacífico ecuatoriano entre Los Lobos y Los Choneros.
Ambas aparecen en la lista de organizaciones “terroristas” designadas por el gobierno a principios del año pasado, cuando declaró un conflicto armado interno.
El comandante de Policía, general Pablo Dávila, dijo la tarde del sábado en declaraciones a la prensa que se tiene identificados a los líderes de las dos bandas que “han operativizado la violencia”. “Los estamos buscando y los vamos a encontrar”, advirtió.
Los Lobos y Los Choneros
Ambas bandas son consideradas por las autoridades como dos de las más grandes agrupaciones de delincuencia organizada con vínculos a organizaciones transnacionales de narcotráfico. Los Lobos y Los Choneros fueron sancionados por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
El máximo líder de Los Choneros, Adolfo Macías Villamar, alias “Fito”, fue capturado recientemente y está a la espera de que concluya el proceso de extradición hacia Estados Unidos, que lo requiere por siete cargos.
La expansión de estas organizaciones criminales ha crecido en Ecuador en los últimos años a la par de la violencia que generan, especialmente en las zonas costeras. Según cifras oficiales, en el primer semestre del año se registraron 4.026 muertes violentas, 535 de las cuales han ocurrido en Manabí.